A raíz del asesinato de Marco Aurelio Ramírez en Tehuacán, Puebla, el pasado 23 de mayo, desde la Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM) condenamos cualquier ataque a la libertad de expresión y de publicación. Estas libertades son el fundamento de una sociedad armónica y democrática, en la que todas las voces deben ser escuchadas y respetadas. En este sentido, el asesinato de periodistas o de cualquier persona que exprese o publique su opinión es inaceptable.
Desde la CANIEM trabajamos cada día para llevar el conocimiento a los lugares más recónditos de México. Editamos libros y revistas de toda índole: textos educativos, científicos, técnicos, cuentos y novelas, ensayos, investigación periodística, etcétera. Estamos comprometidos con la libertad de expresión y publicación. Creemos que sólo el conocimiento nos ayudará a crecer y desarrollarnos hasta alcanzar nuestro verdadero potencial como sociedad.
Es por ello que fijamos nuestra postura ante el asesinato de periodistas en México
Lamentamos profundamente el dolor que tantas familias experimentan al enterarse de que un ser querido ha sido asesinado en el cumplimiento de su profesión. Asimismo, nos parece vergonzoso que México sea el país con más crímenes a la prensa, incluso entre naciones que están en guerra. Es evidente que sigue siendo una vieja práctica acallar a quienes dan cuenta de la verdad de situaciones tan peligrosas como la corrupción, el narcotráfico o la trata de personas.
La labor del periodista, de ofrecer noticias y análisis de la actualidad, es de suma importancia, porque permite a los ciudadanos informarse sobre los acontecimientos más relevantes de su comunidad, país y el mundo y obtener así los elementos necesarios para ejercer nuestra responsabilidad como ciudadanos. Una democracia auténtica es imposible de lograr si no hay personas y organizaciones dedicadas a divulgar las noticias y realizar análisis del acontecer nacional.
En México es difícil, delicado y peligroso llevar a cabo esa responsabilidad, una responsabilidad que recae en periodistas y comunicadores que arriesgan sus vidas a diario por averiguar y difundir información que permite a los ciudadanos entender su realidad.
Nos gusta pensar que en México “gozamos de libertades”, sin embargo, el asesinato de periodistas es un atentado vil y cobarde contra estas libertades. Este es un tema que requiere atención urgente. Exigimos desde la CANIEM que se respete la libertad de expresión y de publicación en nuestro país y se persiga y castigue a aquellos que cometen estos crímenes.