En su sesión plenaria del 17 de octubre el Senado de la República aprobó el Decreto por el que se reforma la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro, en Materia de Precio Único y Libro Electrónico; y el Decreto por el que se reforma la Ley General de Bibliotecas, en Materia de Depósito Legal.
Representan el compromiso por políticas públicas que promueven la lectura, la competitividad entre grandes y pequeñas librerías, y brindan certeza jurídica a escritores reforzando la recopilación que hacen las bibliotecas públicas.
La Cámara Nacional de la Industria Editorial Mexicana (CANIEM) extiende su más amplio reconocimiento al Congreso de la Unión por la aprobación unánime del Decreto por el que se reforman, adicionan y derogan diversas disposiciones de la Ley de Fomento para la Lectura y el Libro, en Materia de Precio Único y Libro Electrónico; y del Decreto por el que se reforman los artículos 33, 39 y 43, y se adiciona el artículo 34 Bis de la Ley General de Bibliotecas, en Materia de Depósito Legal, en la sesión plenaria del Senado de la República del pasado 17 de octubre.
El primero representa un enorme avance en el fomento a la lectura, pues al extender la vigencia del precio único de los libros, pasando de 18 a 36 meses, y al ampliar sus beneficios a la lectura digital, se impulsa la competitividad en igualdad de condiciones y oportunidades para las pequeñas editoriales y librerías con un mercado más abierto, justo y accesible.
Lo más relevante de esta reforma es que permitirá una mayor bibliodiversidad para los lectores, impulsará la cultura de la lectura de forma equitativa y democrática entre la población, pues al garantizar la adquisición de un título en cualquier punto de venta de todo el territorio nacional al mismo precio, se permitirá que quienes viven en comunidades alejadas, pueblos y barrios puedan disfrutar de la lectura con la misma calidad y diversidad que quienes viven en las grandes ciudades.
Asimismo, para asegurar su implementación, la reforma dota por primera vez a la Secretaría de Cultura y a la Procuraduría Federal del Consumidor (PROFECO) de las facultades necesarias para regular, vigilar y garantizar su adecuado y legal cumplimiento en beneficio de las pequeñas librerías y el público lector.
De esta forma, México se coloca a la vanguardia en el plano internacional con países como España, Francia, Alemania, Chile, Brasil y Japón, que desde hace años han adoptado medidas similares para dotarle a sus industrias editoriales nacionales un carácter estratégico y así favorecer la divulgación del conocimiento, la cultura y su identidad nacional.
En cuanto a la reforma a la Ley General de Bibliotecas en Materia de Depósito Legal, esta brinda mayor certidumbre y seguridad a la recopilación de obras a cargo de la Biblioteca Nacional de México, a la Biblioteca del Congreso de la Unión y a la Biblioteca de México que constituyen el Depósito Legal de Publicaciones; al establecer principios fundamentales tales como:
a) Respeto a los derechos de autor y conexos.
b) Implementación de medidas tecnológicas de protección por parte de las Instituciones Depositarias.
c) Obras de contenido educativo, cultural, científico o técnico.
d) Disponibilidad de los materiales para la consulta pública conforme al número de
ejemplares entregados a cada institución depositaria o, en su caso, con base en los
acuerdos que se establezcan con los editores o productores de las obras.
e) Características de entrega de las obras con base en sus formatos de edición, distribución o difusión.
f) Fomento del trabajo colegiado entre las Instituciones receptoras del Depósito Legal.
Además, al aumentar el periodo de entrega de las obras para el Depósito Legal de 60 a 90 días naturales siguientes a la fecha de su publicación, distribución comercial, difusión o puesta a disposición, facilita a los titulares las operaciones comerciales y de traslado sin temor a ser sancionados por eventualidades ajenas a ellos.
La CANIEM reconoce el trabajo de los diputados y senadores del Congreso de la Unión por haber mostrado en todo momento apertura y compromiso con la lectura y cultura del país. Así, culminado el proceso legislativo de ambos temas, exhortamos de la manera más atenta al Ejecutivo Federal para su pronta publicación en el Diario Oficial de la Federación para poder así formalizar la reforma y que sus disposiciones sean legislación vigente.
La CANIEM reitera su disposición para trabajar de manera conjunta con el gobierno de México y el Congreso de la Unión en políticas públicas y legislación que aporte a la cultura y facilite el acceso a la lectura.